miércoles, 8 de junio de 2011

ADN



Al principio de los tiempos, los dioses crearon un solo ser, sin sexo, completo. Pero ese ser empezó a querer más, a querer asemejarse con los dioses y éstos decidieron castigarlos. Separaron a cada ser en dos mitades y los condenaron a buscar su otra su mitad.
Puede que tu otra mitad esté en las antípodas, sea mayor que tú o que sigas buscándola eternamente. Sin embargo, a-couple se ha creado tras encontrarse dos mitades de ese ser.
Laia Garcés encontró a Núria Martí, y Núria tropezó con Laia una singular mañana de setiembre al empezar la carrera de Diseño. Hay cosas que parecen destinadas a estar unidas, a formar una pareja, y así sucedió con este par.
El número dos es un número curioso, se obtiene de dividir un objeto o de sumar dos veces uno entero. Así pues, el dos puede ser la otra mitad o el que complementa las habilidades. a-couple se basa en ambas ideas.
Estar completo a través de dos mitades significa que cada una de ellas representa un punto diferente dentro del mismo razonamiento, es decir, cuando una es lógica, la otra soñadora; cuando una está preocupada, la otra relajada y cuando ambas coinciden es que han terminado el proceso de creación.
El logo de esta marca se basa fundamentalmente en esta dualidad. La bella parte exterior y la parte interior con todos sus interesantes entresijos. a-couple se desarrolla a través de un espejo, donde cada reflejo depende del otro ya que ninguno de los dos sobresale por encima del otro.
Confeccionar una prenda consiste en unir diferentes retales, cortados por unas tijeras que sin sus dos cuchillas no podrían definir la forma; y el hilo y la aguja, unidos, permiten de la nada crear algo. Este proceso mágico tiene un denominador común: el trabajo en pareja.

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